El comportamiento artístico y personal de Ka es el de no preocuparse por la fama y sus efectos secundarios. El manifiesto que representa su música es de puro amor, afición al corte y sampleo de viniles con sonido a tierra, de versos estructurados tradicionalmente y de punchlines que dicen mucho pero no están interesados en ser escuchados, mucho menos en agradar.
Siendo un real digger, no se ve intimidado ni por la colección más grande de viniles; bien podría ser un reto revisar toda la música y viajar en el tiempo, ajustándose a los estándares de diferentes épocas, pero es una motivación para este beatmaker hacerlo porque el diggin es su adicción y lo demuestra en sus beats y en esas líricas consistentes.
Estos factores se demuestran en la abstracción con la que rapea, como si estuviera hablándo consigo mismo en cada uno de sus temas. Un ejercicio lírico para escucharse, con respiraciones incluidas y beats tan densos que literalmente te dejan en la mejor nota de tu vida.
Destaca la colaboración junto a Roc Marciano, Soap Box y el track Off The Record, del que se presentó un video donde Ka aparece en una gigantesca tienda de discos de acetato haciendo diggin' y a medida que se encuentra los clásicos albumes de rap va narrando en la letra de la canción sus impresiones y recuerdos sobre esas joyas de la música negra. Altamente recomendado, el video sirve para redescubrir grupos y para quien no conozca ciertos proyectos le puede servir muy bien.
Ka-Off The Record
La constante investigación de discos y artistas -dentro y fuera del rap- le otorgan un amplio conocimiento del tema que evidentemente lo influencia. Este pana ha escuchado tanto rap que se convierte en la tesis perfecta del fanático a morir del hip-hop norteamericano, el estereotipo del digger y MC perfecto. Cuando la gente te pregunte que es rap, enséñales a Ka.
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